En tres dimensiones
Si algo ha conseguido la tecnología en la conducción es hacerla más segura. Pero todavía no es suficiente para prevenir los accidentes de tráfico y sus consecuencias, de modo que el Instituto Tecnológico de Óptica, Color e Imagen (AIDO), Ficosa, Tedesys y el Instituto de Óptica del CSIC no se rinden. Juntos, investigan en el proyecto Pleno3D un sistema pionero en el mundo que permitirá sustituir los espejos retrovisores exteriores por una cámara plenóptica (3D) que reproducirá una imagen en tres dimensiones del entorno y que se visualizará en el interior del vehículo gracias a un monitor.
Capturar y reproducir
Aido se encarga de la parte óptica del proyecto, tanto la captura como la reproducción de la imagen. Como cuenta Ángel Tolosa, responsable del proyecto para Aido, el centro se encarga de investigar «cómo capturamos para generar suficientes vistas y que nos den información de profundidad y cómo tratamos esa imagen para proyectarla en un monitor y la puedas ver en 3D como si fuera un espejo pero sin elementos adicionales». Por su parte, Ficosa -que sería quien comercializaría el producto- y el CSIC investigan la parametrización, es decir, la posibilidad de indicarle al usuario a qué distancia se encuentran otros coches o los peatones.
Facilitar la conducción
Aunque el objetivo final es mejorar la seguridad vial, existen otras metas que alcanzar antes de su finalización en mayo de 2015, como mejorar la aerodinámica de los vehículos y la percepción que el conductor tiene de su entorno. «Cuando coges práctica el cerebro es hábil y te acostumbras a medir las distancias pero este dispositivo daría mayor facilidad a la conducción», concluye Tolosa.