Los mensajes SMS están en claro declive. Las posibilidades de los smartphones y de Internet para comunicarnos de forma prácticamente ilimitada están provocando que el mensaje de texto caiga en desuso más rápidamente cada año. Sin embargo, existen estudios que auguran la supervivencia o agonía de este servicio durante otros cinco años más. Por lo que parece que la lucha entre compañías y aplicaciones de comunicación seguirá aún durante un tiempo.
Al menos esta es la conclusión a la que llega un estudio de Informa Telecoms & Media, el cual asegura que el tráfico de mensajes de texto o SMS seguirá siendo mayoritario hasta el 2016, superando, incluso, el uso de aplicaciones tan célebres como WhatsApp, ChatOn, iMessage, BlackBerry Messenger, etc. Un dato que, cuanto menos, llama la atención. Aunque hay que fijarse en los pormenores para entender esta situación.
En concreto, según este estudio, los mensajes de textos ocuparon casi el 65 por ciento del tráfico en 2011 a nivel mundial, y está previsto que para 2016 se reduzca hasta el 42 por ciento. Una reducción en su uso cuyo lugar ocuparán las comentadas aplicaciones de mensajería gratuita a través de Internet. Éstas aumentarán de un sutil 17 a un 35 por ciento en su uso en los próximos cinco años, quedando aún por debajo de los mensajes. Algo que cuesta bastante creer dado el ritmo expansión de smartphones y el crecimiento en las contrataciones de tarifas de datos.
Pero ésto es precisamente lo que produciría el mantenimiento en el uso de los SMS. Y es que, las compañías móviles de todo el mundo parece intentar defender este servicio con toda clase de promociones, incluso ofreciendo la gratuidad del servicio al contratar una tarifa de datos, como ya hace Movistar. Y no sólo eso. Los mensajes de texto siguen siendo un buen servicio para las empresas que quieren hacer llegar su publicidad de forma directa y personal, para los bancos que mandan códigos de seguridad a sus clientes o, incluso, para evitar tener que imprimir un billete de viaje en casa, pudiendo llevar un número localizador en un mensaje de texto e imprimirlo en una máquina de autocheck-in.
El caso de España es algo más drástico, y es que la evolución de ventas de smartphones es diferente para cada país. En el nuestro, que cuenta con la mayor concentración de teléfonos inteligentes del mundo, la caída en el uso de los mensajes SMS ha sido muy notable. Mientras que otros países han aumentado su tráfico, en España ha descendido un 27 por ciento en su uso. Algo que ha repercutido directamente en los ingresos de las teleoperadoras, quienes han dejado de ganar un 26 por ciento en estos últimos años en nuestro país. Lo que se traduce en 10.400 millones de euros a nivel mundial tan sólo el pasado año.
Pero no hay que engañarse, estamos en un proceso de cambio donde el SMS irá perdiendo fuerza a favor de las diferentes aplicaciones actuales. Y ello no supondrá la pérdida de ingresos para las operadoras móviles que están sustituyendo las ganancias del servicio del SMS por las tarifas de Internet. La importancia de éstas es tal que en los últimos meses hemos asistido a la creación de diferentes plataformas de comunicación que dependen, directamente, de las propias compañías. Herramientas como TU Me, la última en llegar de la mano de Telefónica, o Joyn, que pretende competir directamente contra WhatsApp. Aplicaciones cuya descarga y servicio es gratuito, al menos por el momento.
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